Pastel Rigatoni

De Italia va la cosa, chavales. Y es que la gastronomía italiana es santo de nuestra devoción, todo lo que lleve pasta, masa de pizza, salsa y una buena cantidad de comida nos pirra. En la búsqueda y captura de ideas que poder llevar a cabo encontramos esta en el blog Sugar Plum, que es básicamente una tarta con macarrones de los rallados y mogollón de queso (parmesano, mozzarella rallada, salsa alfredo...). Hipercalórica e hiperbuenísima.


Las recetas que vimos no llevan carne picada, pero vaya, es una pasada lo que mejora el sabor. En la receta original se usa un bote de salsa alfredo y crema agria, pero como no pude encontrar nada de eso utilicé otras cosas para sustituir y el resultado fue tremendo, a los más queseros os encantará.

Ingredientes (8 porciones):
Para la salsa alfredo: 100gr de mantequilla, 250ml de leche, 100gr de queso rallado mozzarella, sal y pimienta.
2 huevos
1 yogur natural
200gr de queso ricotta
Queso parmesano rallado al gusto
Ajo en polvo
500gr de macarrones rallados, o rigatoni
**Opcional: 100gr de carne picada para cubrir

Preparación:
Empezamos cociendo los macarrones con las instrucciones del fabricante, precalentando el horno a 200º y mientras, hacemos la salsa alfredo diluyendo la mantequilla con la leche en una cazuela y añadiendo mozzarella, sal y pimienta, removemos hasta que tengamos una mezcla homogénea y reservamos. Escurrimos los macarrones ya cocidos y los ponemos en un molde desmontable previamente engrasado. En la receta original la presentación era mucho más vistosa que la mía, porque los macarrones estaban todos de pie, pero cuando vayáis a hacerlo, pongáis dos de pie y veáis lo coñazo que es los echaréis sin más en el molde como yo. En la cazuela donde tengamos la salsa añadimos los dos huevos, el yogur y el queso ricotta a fuego suave, removiendo bien hasta que todo esté bien incorporado. Ponemos ajo en polvo al gusto, removemos bien y vertemos toda esta mezcla sobre los macarrones en el molde. Por encima extendemos el parmesano rallado, y opcionalmente la carne picada. Lo ponemos todo al horno a 180º durante media hora, y listo para disfrutar.


La clave de esta receta son las especias. Es importante que pongáis el ajo en polvo y la pimienta negra molida, porque se nota y hace que la salsa tenga un sabor especial. 


Si, como nosotros, queréis poner carne picada sobre el queso parmesano rallado, no tenéis más que desmigarla y mezclarla con medio tomate muy picado, la ponéis por encima extendiendo bien y se hará en el horno a medida que la salsa cuaja.



FUENTE: Sugar Plum