Berenjenas rellenas de tofu

Creo que no hace falta que diga que me he enamorado perdidamente de tofu. Ya lo hemos probado en tarta de queso, de chocolate, en hamburguesa y ahora nos ha dado por las berenjenas. El tofu es un sustituyente de la carne cojonudo, porque a poco que lo especies y lo cocines con alguna verdura coge sabor muy rápido, por lo que no tiene nada que envidiar a la carne en sí. Lo mejor de todo es que es muy ligero y no da sensación de hartura o muerte instantánea, como nos pasaba con las berenjenas rellenas de carne picada y resulta que tiene mogollón de vitamitas y cosas buenas pa' mi body, así que os dejo la receta para que os animéis y sorprendáis en casa (vosotros no digáis que no es carne, ya veréis cómo cuela).



Ingredientes (para dos personas):
1 berenjena
200gr de tofu japonés
1 diente de ajo picado
1/2 cebolla picada
2 pimientos picantes picados
Grana Padano rayado

Condimentos:
Pimentón picante
Hierbas provenzales
Albahaca
1 pastilla de caldo de pollo
Salsa de tomate al pepperoni (vale tomate normal, pero somos muy sibaritas)

Preparación:
Cortamos la berenjena por la mitad y vaciamos ambas partes, no demasiado para que se mantenga bien y pueda recoger el relleno. Cogemos las cáscaras y las ponemos en el microondas un minuto para que tengan calor y se ablanden un poco. Empezamos a picar la berenjena que sacamos, el ajo, la cebolla y los pimientos y empezamos a sofreír: primero el ajo, luego la cebolla, el pimiento y la berenjena, además salpimentamos en este punto con albahaca y sal. Vamos picando el tofu en taquitos y lo mezclamos bien con las hierbas provenzales (hay un tofu que ya viene especiado y es magnífico, también lo podéis comprar así y obviar este paso) para añadirlo a la sartén y ponemos una gotita de salsa de tomate. Ahora, con todo en la sartén, condimentamos a lo loco con media cucharadita de pimentón picante y la media pastilla de caldo. Dejamos que coja bien sabor, sacamos el relleno de la sartén y lo vamos poniendo en la cáscara de la berenjena, llenándola bien, y ponemos por encima queso rayado.
Por último ponéis el horno en modo gratinado y metéis las berenjenas en la bandeja, sobre papel de aluminio para no manchar nada, y dejáis que el queso se derrita (unos diez minutos son suficientes).