Bizcocho de nueces

En estas fechas tan señaladas, y no digáis que no porque en los supermercados ya venden turrón, una de las cosas que más me apetecen son los frutos secos tales como las castañas o las nueces. Éstos últimos se usan mucho en repostería, y gracias a un buen puñado que mi padre trajo a casa se me ocurrió probar el molde de plum cake (el rectangular alargado) para hacer algo distinto a los marble cakes (esos bizcochos que son de chocolate y vainilla y van cambiando de color según el sabor por dentro). El resultado fue espectacular, la textura es muy esponjosa y de sabor... con deciros que no me duró ni un día ya os lo digo todo.





Ingredientes:
100gr de azúcar
150gr de harina
50gr de nuez picada
1 sobre de levadura química
1 cucharada de esencia de vainilla
100cc de aceite de oliva suave
3 huevos grandotes
Un puñado de medias nueces para decorar

Preparación:
Precalentamos el horno a 180º y enharinamos el molde plum cake. A continuación picamos las nueces en una picadora, aunque también se pueden comprar picadas directamente, a mí me gusta hacerlo de forma manual para que la nuez quede algo gordita y sea más fresca. En casa tenemos una picadora de Tupperware que sirve para todo y que además no es demasiado cara, pero ya os hablaré de ésto en otra ocasón. Después de tener la nuez picada la reservamos y comenzamos batiendo los huevos con el azúcar hasta que blanquee y doble el tamaño. Añadimos en este punto la cucharada de vainilla y el aceite poco a poco, integramos la harina con la levadura y por último la nuez picada, mezclando bien esta última con espátula, no con batidora. Echamos toda la masa en el molde de plum cake y, para decorar, pasamos por harina las medias nueces para que no se hundan y las ponemos encima con cuidado. Para darle un toque especial hice una mezcla de azúcar blanco, azúcar moreno y canela y lo puse a puñaditos encima de las nueces.